De profesión: cocineros de la comunicación

Publicado por Juanjo Brizuela en

Más o menos coincidiremos en que el mundo de la comunicación está cambiando. Y con él todo el «sistema», o la «industria», como le gustan decir a algunos. Desde mi punto de vista, provocado especialmente por un cambio en los hábitos de consumo y de ocio, la tremenda fragmentación de medios, el valor que aporta la red y por un mayor aprendizaje en las tomas de decisión del «ciudadano-consumidor». ¿Hasta ahora bien? Con ello, disciplinas como el marketing lateral, la innovación (tanto en producto, como en servicio y en personas (éstas dos últimas en menor medida), socialmedia y el branding adquieren un mayor protagonismo.

Así, el modelo de «propuesta de valor» de la agencia-empresa-estudio-consultora-vaya-usted-a-saber-qué, también está en solfa. De la tradicional agencia de publicidad, a la que muchos ya le estamos rezando sus últimas oraciones, aparecen nuevos conceptos y modelos que realmente sí que aportan cierta luz en el oscuro horizonte… a mí me llaman la atención personalmente algunos como Crispin, Porter & Bogusky, Mother, Fallon, Razorfish, *SCPF, Sra.Rushmore, Shackelton, Mejorando lo presente, etc… diferentes entre ellos pero con planteamientos que reconocen la adaptación a una nueva época.

Pero lo que más me importa es la filosofía que está detrás de este nuevo modelo, de esta nueva forma de funcionar. Voy a hacer un paralelismo con el mundo de la cocina, que cada vez que profundizo un poco más en él, me doy cuenta que tiene muchísima relación con nuestra profesión: branding & comunicación. Y me basaré para ello en una reciente entrevista que realizó El País al (excelente, por cierto, doy fe) cocinero Andrés Madrigal:

«Es un compromiso«, dice el cocinero. «La cocina ha de ser primero reflexiva, intuitiva y si el proceso lo necesita, convulsiva«.

«La estrella Michelin me alumbró y me deslumbró«, dice el cocinero que la perdió al año de recibirla. «Me hizo ver, finalmente, que necesitaba una cierta purificación. Un cocinero no debe ser sólo alguien que da de comer. Para mí el compromiso es satisfacer, divertir y transmitir conocimiento gastronómico«.

«La cocina por sí misma no es un arte, su origen es práctico y útil, y ésa no es una cualidad del arte»

«Pero cuando la cocina es el oficio de un artista, cuando se convierte en su necesidad, en su campo de creación, se eleva a otro nivel y la experiencia es parecida a la que se tiene frente a una obra plástica. Y el proceso artístico es una catarsis del artista con su obra, un momento de identidad único«.

Describe su trabajo en la cocina, pero los mismos términos, catarsis, experiencia única, se podrían utilizar para reflejar los sentimientos del comensal ante sus creaciones.

«El plato perfecto», teoriza Madrigal, «es el plato que acierta exactamente con lo que necesitas y a la vez te traslada a otro lugar de sensaciones extraordinarias. Se consigue cuando se busca una buena cocina y se permite uno el tiempo de disfrutarla«.

P.D.: Las comillas y destacados son míos. A buen entendedor, pocas palabras faltan… AMÉN


2 commentarios

Amalio A. Rey · 31/03/2010 a las 08:06

Juanjo:
Gracias por pasarte por mi blog, es un placer. Oye, el paralelismo de la comunicación 2.0 con el mundo de la cocina (o más bien, de los cocineros-que-se-divierten) es un recurso pedagógico muy eficaz. Es cierto, como dice Madrigal, que la clave está en saber «satisfacer, divertir y transmitir», pero a mí no deja de preocuparme el hecho de que la comunicación se vuelva un fin en sí misma, que muera de especialización. Necesitamos naturalidad, y por eso prefiero hablar de «conversación». Tengo la sensación que a los «comunicadores» profesionales (no es tu caso) les cuesta asimilar y verse vendiendo un concepto tan trivial, tan de andar por casa, tan mundano como «conversar», que parece decirles «oye, no haces falta, deja fluir la charla». El término «comunicación» suena más profesional, de especialistas. Sin embargo, esto de comunicar-conversando, de un modo natural y coherente, es un desafío tremendo…

Juanjo Brizuela · 31/03/2010 a las 16:16

Amalio,
Gracias a ti por pasearte por aquí, también. Sigo tu blog a menudo y la verdad es que estoy «enganchado».

La evolución de la comunicación está pasando por ir desde la información (en los útlimos años) a la comunicación en su sentido más etimológico, y eso es conversación, diálogo, feedback, intercambio, etc.

El problema que tienen muchas marcas, y muchos gestores de la comunicación, es que les da «pánico» el enfrentarse a lo que la gente opina, dice o comenta. Parece que todo es control y todo lo que se escapa de su ámbito de actuación M-I-E-D-O.

Por eso, este cambio de actitud (principalmente) y tal y como lo comenta Madrigal, es necesario y se va a acabar implantando en muchas organizaciones… espero que sea natural y normal.

Seguimos en contacto.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *